Cirugía Plástica Postparto: Recuperando la Confianza

La cirugía plástica postparto está en aumento, ya que las madres buscan recuperar su confianza y sentirse bien consigo mismas después del embarazo. Exploramos los procedimientos más populares.

El envejecimiento facial es una preocupación común, y el cuello es una de las áreas que más lo evidencian. El lifting de cuello, también conocido como ritidectomía cervical, es una cirugía que busca mejorar la apariencia del cuello y la mandíbula.

En esta intervención, se eliminan el exceso de piel y grasa, y se tensan los músculos subyacentes para lograr un aspecto más juvenil. Es importante destacar que el lifting de cuello puede ofrecer resultados notables y duraderos cuando se realiza por cirujanos experimentados.

Uno de los logros más destacados ha sido la reconstrucción exitosa de dedos, manos y muñecas gravemente dañadas debido a accidentes o lesiones traumáticas. Estos procedimientos no solo restauran la funcionalidad de la mano, sino que también mejoran significativamente la calidad de vida de los pacientes.

En los estadíos iniciales, en presencia de nódulos o cuerdas sin contracturas, se requiere una conducta expectante con controles periódicos. Si por el contrario, cuando el o los dedos afectados presentan ya una contractura en flexión que afecte a la función de la mano, estaría indicado el tratamiento quirúrgico.

El objetivo de la cirugía consiste en resecar el tejido enfermo para mejorar después con una rehabilitación adecuada la extensión y flexión de los dedos. A pesar de la cirugía, la enfermedad puede recurrir y los dedos comenzar a cerrarse nuevamente. DE acuerdo con la severidad de la lesión, el cirujano decidirá el método apropiado.

El objetivo del tratamiento es aliviar el dolor.

En los casos de aparición reciente un tratamiento simple basado en el reposo de la mano afectada junto con la toma de antiinflamatorios puede aliviar el dolor, pudiendo completarse con varias sesiones de fisioterapia. Si el dolor es muy intenso, puede ser necesario la inmovilización transitoria de la muñeca y el pulgar por algunas semanas.

En los casos crónicos o en aquellos en los que fracasó el tratamiento conservador la cirugía puede estar indicada: se abre el túnel donde se encuentran los tendones inflamados permitiendo regresar al paciente rápidamente a sus tareas previas una vez finalizada la recuperación.

La enfermedad se presenta generalmente después de los 40 años y es 10 veces más frecuente en hombres que en mujeres. Con frecuencia son bilaterales, pero rara vez aparecen al mismo tiempo, siendo variable el grado de deformidad. Si bien no se conoce la causa de esta enfermedad, se ha demostrado una asociación hereditaria. Por el contrario, no se ha comprobado que traumatismos en la mano o el tipo de trabajo manual aumenten el riesgo de contraer la enfermedad o afecten su evolución.

La retracción de la aponeurosis palmar y sus prolongaciones digitales van formando nódulos y cuerdas fácilmente palpables que cierran lenta pero progresivamente la mano.